6 Tiferet

TiferetTiferet (Belleza, Armonía) ocupa exactamente el centro del Arbol de la Vida, en el centro del Pilar Central.

La sexta sefirá es el sol de ocho rayos –los ocho senderos que confluyen en ella-, y del mismo modo que Daat separa la Divinidad, el Gran Rostro, de su manifestación, el resto del Arbol conocido como Pequeño Rostro, Tiferet separa la parte superior del Arbol, que representa lo transcendente, lo que está más allá de la individualidad, de la parte inferior, en la que nuestra individualidad se manifiesta como personalidad, compuesta por emociones (Netzaj), pensamientos (Hod), ego (Yesod) y cuerpo físico (Malkut).

Tiferet es el corazón del Arbol, y como tal se corresponde con el chakra cardiáco Anahata, que también ocupa una posición central entre los 3 chakras inferiores y los 3 superiores. El nombre de Belleza se debe a que su posición central es la clave del equilibrio de todo el Arbol, y como sabían los griegos muy bien la belleza es un resultado de la armonía, y ésta a su vez requiere del equilibrio. Un exceso o defecto acusados de algo, rompen el equilibrio y dan al traste con la armonía. Por ello la proporción era tan importante para los clásicos, y la llamada divina proporción, o número áureo: el número Phi, preside no solo obras de arte de gran belleza sino todas las manifestaciones de la naturaleza, desde la espiral de un caracol a la de una galaxia. La asociación del número áureo con Tiferet puede verse también en el metal y planeta atribuidos a la sefirá: el oro y el sol. El equilibrio que Tiferet debe conseguir es el de las sefirot de Jesed y Guevuráh, el eje horizontal correspondiente a los dos brazos en el cuerpo humano, y a los conceptos de Misericordia y Rigor.
Merkabbahcabala

ORDEN DE ÁNGELES EN TIFERET
MALAJIM o SHINANIM
(Virtudes en la jerarquía angélica cristiana)

Tiferet

«MALAJIM o SHINANIM Malajim significa Reyes; Shinanim, Elevados o Excelsos.
En realidad, el nombre Malajim (MLKIM) con una Alef muda entre la Lamed y la Kaf (MLAKIM) se transforma en la palabra para “ángeles” en general. Ambas acepciones son correctas. Hemos ya dicho que la palabra Maláj (con alef) significa mensajero. También Tiféret expresa la cualidad de mediador, por lo que este orden oficia la cualidad angélica en general de transmisión de las bendiciones procedentes de lo alto. Su carácter de rey se lo confiere su conexión con el self, del cual son los arquitectos.

Como ángeles solares son también reyes y excelsos, brillantes, energéticos y vitales, comunicando alegría de vivir, iluminación, solidaridad y altruismo. Son, pues, los ángeles del self, del sí mismo, del verdadero yo. Conocen el destino espiritual del individuo, cuál es su misión espiritual, y por tanto intentan inspirarle para que llegue a realizarlo. Ese es su papel como ángeles guardianes o ángeles de la guarda, hasta que el individuo sea capaz de sostenerse sobre sus propios pies. Promueven un desarrollo armónico, equilibrado, basado en la belleza de la armonía, en la centración, la integración. Son los que realizan la unión con la conciencia espiritual en todos los reinos, en todos los dominios, no sólo en el humano.

Mediante los Malajim o Shinanim cada ser, fuerza o forma de Asiá, conecta con su arquetipo espiritual. Y son reyes porque tienen autoridad para gobernar su propio reino o esfera de manifestación. Entre sus huestes se encuentran los Reyes de los reinos elementales y los ángeles de las naciones. En general de todos los dominios de la realidad ya que, como hemos dicho, encarnan su principio espiritual. Aparecen en el Samo 68, en el versículo 17: “Las carrozas de Elohim se cuentan por miríadas, con miles de ángeles (Shinan). Adonai está entre ellos, como en el Sinaí, en el Santuario.” Son la manifestación directa de la Shejiná.»
Eduardo Madirolas
La cábala de la Luz

RAFAEL, Curación de Dios
PRÍNCIPE DE LOS  ANGELES EN TIFERET
41. Hahael
42. Mikael
43. Veuliah
44. Ylahiah
45. Sealiah
46. Arial
47. Asaliah
48. Mihael